La Federación Nacional de Asociaciones Inmobiliarias hace público el ‘Estudio Perspectivas y Retos del Sector de las Agencias Inmobiliarias’
LAS AGENCIAS INMOBILIARIAS PREVÉN UN CRECIMIENTO DE SU ACTIVIDAD ECONÓMICA DEL 6,4% EN 2019
El estudio pone de manifiesto la percepción de incertidumbre de los agentes inmobiliarios sobre el sector y el mercado inmobiliario
FAI reclama la aplicación de criterios técnicos en la regulación en materia de vivienda para neutralizar la amenaza de una nueva burbuja inmobiliaria
Madrid, 04 de junio.- Los agentes inmobiliarios prevén un crecimiento del 6,4% de su actividad económica durante 2019 respecto al año anterior, según los resultados del primer ‘Estudio Perspectivas y Retos del Sector de las Agencias Inmobiliarias’ realizado por la Federación Nacional de Agencias Inmobiliarias (FAI).
El estudio refleja que el 59,75% de los agentes inmobiliarios encuestados prevé que la evolución del volumen de negocio será positiva, el 22,14% que se mantendrá estable y el 18,13% que será negativa. La respuesta más frecuente en este apartado es la estimación de un aumento de entre un 10 y un 20% para el 26,90% de los encuestados.
En relación a la situación actual de las agencias inmobiliarias, los encuestados la valoran de forma ligeramente positiva, con una puntuación de 3,36 en una escala de 1 a 5. En este caso, el 39,57% la considera positiva o muy positiva, el 52,76% la considera estable, y solo un 7,67% la considera negativa o muy negativa.
En referencia al futuro de las agencias inmobiliarias, los empresarios y profesionales del sector lo perciben con incertidumbre; teniendo en cuenta que la respuesta media que recibe la pregunta es de un 3,1 en una escala de 1 a 5. En porcentajes, para el 56,67% de los encuestados el futuro será ni bueno ni malo, para el 26,91% será bueno o muy bueno y para el 16,42% será malo o muy malo.
Sobre el modelo de negocio, el 75,78% de los agentes inmobiliarios que han participado en el estudio consideran positivo pertenecer al sistema de MLS, basado en la gestión comercial compartida de propiedades inmobiliarias para la venta o el alquiler. Con una valoración de 4,06 en una escala del 1 al 5, es la puntuación más alta obtenida de entre todas las preguntas de la encuesta.
LOS RETOS Y PRIORIDADES DE LAS AGENCIAS INMOBILIARIAS
El estudio realizado por FAI también analiza las prioridades para el sector. Los datos de la encuesta revelan que pasan, en primer lugar y por orden: por una mayor visibilidad y prestigio de la figura del agente inmobiliario, influir en las administraciones públicas para una regulación técnica y eficaz del mercado, por la necesidad de promover los registros de agentes inmobiliarios en las comunidades autónomas y transmitir una imagen del sector de compromiso social.
En el ranking sobre los principales retos a los que debe hacer frente el sector, la dignificación de la imagen del sector se sitúa en primer lugar, según los agentes inmobiliarios encuestados. Le siguen la necesaria unión del sector, la falta de cualificación personal, la necesidad de adaptarse a las nuevas tendencias de consumo y del cliente y la irrupción de las proptechs (compañías inmobiliarias digitales).
El informe ha sido realizado a través de una encuesta en la que han participado un total de 420 profesionales del sector de las agencias inmobiliarias de 15 comunidades autónomas, desde el 26 de marzo al 31 de mayo del presente ejercicio.
LA PRESIDENTA DE FAI ALERTA SOBRE LA INESTABILIDAD Y DEFICIENTE REGULACIÓN DEL MERCADO INMOBILIARIO
Para la presidenta de FAI, Nora García, la previsión de crecimiento de un 6,4% es positiva, pero se produce en un contexto de preocupación en el sector.
A tenor de los datos del estudio, García alerta sobre los riesgos que puede traer la incertidumbre existente, como consecuencia de la inestabilidad en el mercado inmobiliario asociada, en parte, a la deficiente regulación del mercado inmobiliario. Dos de los ejemplos más recientes, según la presidenta de FAI, son “el improvisado recién aprobado Decreto del Alquiler, que pone en peligro la estabilidad de los precios y puede dejar fuera del mercado a los arrendatarios más vulnerables, provocando el efecto contrario a lo que se pretendía con su entrada en vigor”; o la nueva ley hipotecaria, que “supondrá un frenazo en la concesión de los préstamos para la compra de un piso o una casa, como ya han advertido las propias entidades financieras”.
Por otro lado, y según las conclusiones del informe respecto a los principales retos a los que debe hacer frente el sector, la presidenta de la Federación Nacional de Asociaciones Inmobiliarias asegura que la dignificación de la imagen del sector inmobiliario, fuertemente dañada durante la crisis económica, pasa, principalmente, por impulsar las buenas prácticas profesionales y contar con un código ético, en la línea del establecido por FAI, como garantía de compromiso social.
En esta misma línea, el estudio, remarca García, pone de manifiesto “la necesidad de reforzar la interlocución de los agentes inmobiliarios para poder influir en la administración y conseguir, de esta manera, una regulación técnica y eficaz en materia de vivienda, que sea capaz de proteger al mercado de la temida burbuja inmobiliaria”.